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La Región Más Transparente - Carlos Fuentes

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Lo que tenés que saber de este producto

  • Género: Literatura y ficción.
  • Subgénero: México.
  • Novela.
  • Número de páginas: 565.
  • Edad recomendada: de 0 años a 99 años.
  • ISBN: 9788437603285.
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Características del producto

Características principales

Autor
Carlos Fuentes
Idioma
Español
Editorial del libro
Cátedra
Con índice

Otros

Cantidad de páginas
565
Con páginas para colorear
No
Con realidad aumentada
No
Género del libro
Literatura y ficción
Subgéneros del libro
México, Novela
Tipo de narración
Novela
Edad mínima recomendada
0 años
Escrito en imprenta mayúscula
No

Descripción

Casi nuevo.

Sinópsis:

La ciudad de México, el personaje inmenso de La región más transparente, es el escenario que tritura y resucita, la naturaleza de cemento y desperdicio y modernidad. En La región más transparente se conjuntan tres energías: la capitalina, la capitalista y la inagotable del autor, que a la densidad de la Historia opone las vibraciones del infinito urbano tal y como las recrea (inventa) la prosa que es también arquitectura de las imágenes. «Aquí nos tocó, qué le vamos a hacer.» Y la consigna de la resignación es el mambo de los comienzos, no un paisaje determinista sino la identidad profunda de dicha y desdicha, que le permite a la ciudad oprimir y liberar, corroer las ilusiones y profesionalizar el candor, fomentar desgracias monumentales y alegrías que se burlan del destino. Muy especialmente, la ciudad genera los símbolos que las generaciones viven como estímulos poderosos, o como tradiciones de pie de página. Sin algún ejercicio de libertades no se resiste la injusticia social, sin el cultivo de las individualidades la ciudad no conoce las vibraciones del despegue y sin el autoengaño no se perfilan las individualidades.
Qué curioso y qué rara coincidencia. Al hecho más significativo de ‘La región más transparente’, el debut de la ciudad moderna, nocturna y desmadrosa, lo enmarcan seres muy anacrónicos. Desde la perspectiva de hoy, resultan enmarcaciones de lo antiguo o de lo pintoresco (ese grado fotogénico de las cumbres), los banqueros que fueron recaderos, los falsos aristócratas, los zánganos, los intelectuales cuyas reflexiones son música de fondo del desarrollismo, las putas, los proletarios, la élite circular de los cocteles, los intelectuales, los productores de cine, los aristócratas de tres generaciones que alquilan sus modales de mesa, los arrendatarios de la oportunidad, los prototipos que la literatura convierte en señales de la memoria colectiva. Pero no sólo la ciudad es distinta a la suma de sus partes, también las visiones de conjunto se renuevan a diario, en la ciudad el bosque no deja ver los árboles, el recelo vuelve indistinguibles la clandestinidad y el anonimato, y la transgresión, ese recurso de las tradiciones del porvenir, aprovecha las ofertas lúdicas, sensoriales, sexuales, al alcance de la mano, y no es albur.