Perfume Issey Miyake Pleats Please Edit F, 100 ml

Descripción

Olfactory Family

Floral Fruity
Heart Notes

Peonía, guisante y plantilla
Notas de fondo

Pachulí u oriza, cedro, vainilla absoluta y almizcle blanco
Notas altas

Eau de toilette Pear
Pleats Please para mujer, 100 ml
La emblemática línea Pleats Please Issey Miyake lanza su propia fragancia.
Es un perfume que rinde homenaje a la creación de una moda seminal: una infusión de emoción y un himno olfativo a la alegría.
L'Eau d'Issey y L'Eau d'Issey Pour l'Homme provienen de la fuente de las fragancias de Issey Miyake; sus aguas cristalinas y brillantes anunciaron la primera incursión en la perfumería de Issey Miyake.
La fragancia Issey Miyake de Pleats Please tiene su propio brillo especial, la faceta más reciente y brillante del trabajo del diseñador.
El concepto de pliegues se remonta a los inicios de la civilización.
Las mujeres del antiguo Egipto llevaban kalasiris.
La hermosa estatua de Karomama en el Louvre representa al adorador divino con un vestido plisado.
En la década de 1980, Issey Miyake elevó el plisado a un nuevo nivel, logrando combinaciones paradójicas de creatividad y practicidad, moda y vida cotidiana, atemporal y actual, y clásico y alta tecnología.
Pleats Please: una marca única, una historia diferente, un concepto de moda universal.
Desde el punto de vista de Issey Miyake, el plisado encarna un concepto universal, con pocos equivalentes en la historia de la moda.
Las mujeres de todo el mundo han adoptado esta idea.
Con sus formas básicas y sus tejidos cómodos, que garantizan un fácil uso y cuidado, Pleats Please representa un soplo de libertad, el placer de la libertad de expresión y el movimiento sin obstáculos.
Para capturar el carácter alegre y desenfadado de Pleats Please, Aurélien Guichard compuso un ramo brillante y alegre.
Un néctar de felicidad, una invitación a saborear los placeres de la vida.
Su principal inspiración fue la luz, un elemento intrínseco al mundo de Issey Miyake, en forma de reflejos brillantes.
Luego surgió la idea de la verticalidad, que reflejaba la estructura de los pliegues.
A esto se sumó el movimiento, inducido por el flujo de los pliegues, a medida que se mueven con el cuerpo.
Fluida y, sin embargo, finamente esculpida, la composición está impregnada de una sensación de confort.