Sobre La Tumba De Huysmans, Léon Bloy. Ed. Bucarest

Descripción

La amistad literaria entre Léon Bloy, el panfletista más resonante de su generación, y Joris-Karl Huysmans, el discípulo preferido de Émile Zola, resulta paradigmática. Compartieron búsquedas estéticas y espirituales, Bloy reseñó algunas de sus novelas y su lúcida lectura de A contrapelo, el libro con el que Huysmans se consagró en 1884, señaló por primera vez la novedosa dirección que estaba tomando la literatura francesa.
Elogiosas o despectivas, las críticas de Bloy exhiben la férrea gimnasia de pensamiento que exige la reflexión literaria. Y en esto son, todavía hoy, una lección vigente sobre cómo leer. Su maestro y tutor, Jules Barbey d'Aurevilly, ya había señalado una penosa tendencia de época: los críticos se estaban volviendo cada vez más condescendientes, lisonjeros y benignos, olvidando la intrepidez y la asertividad que caracterizan el oficio del crítico.
En 1913, Bloy reunió las reseñas y las publicó con el título Sobre la tumba de Huysmans. El libro, hasta hoy inédito en castellano, es tanto el testimonio de una amistad (que Michel Houellebecq retrató en Sumisión), como la confirmación de que los verdaderos ejercicios del juicio no los escriben quienes tienen las mejores intenciones, sino aquellos que, incluso si se equivocan, son injustos o ceden demasiado a sus pasiones —y por esto mismo, se convierten en críticos inferiores—, escriben para pensar en libertad.

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