Guía de compra de bicicletas eléctricas: ventajas y características

Si te gustan tanto los vehículos a motor como los que funcionan a pedal, hay uno superador que combina los dos sistemas y es especial para vos: la

bicicleta

eléctrica, también conocida como e-bike.

Las e-bikes están equipadas con un motor eléctrico que asiste al ciclista durante el pedaleo. Este vehículo combina la funcionalidad tradicional de una bicicleta con nuevas tecnologías para proporcionar una experiencia de pedaleo más fácil y eficiente.

En los últimos años, las

bicicletas

eléctricas han ganado una gran popularidad debido a que ofrecen una forma de transporte ecológica y económica, mientras que promueven un estilo de vida saludable. En este artículo, vamos a contarte sobre sus ventajas y te daremos consejos para que puedas elegir una.

Las bicicletas eléctricas son un tipo de vehículo que da ventajas tanto para el usuario como para el ambiente.

A pesar de que cuenta con asistencia eléctrica, las bicicletas eléctricas requieren que el ciclista tenga que pedalear, lo que significa que se sigue realizando ejercicio físico. Este tipo de actividad es muy buena para mejorar la salud cardiovascular, aumentar la resistencia y fortalecer los músculos.

Las bicicletas eléctricas tienen una baja emisión de dióxido de carbono, lo que las convierte en una opción de transporte mucho más ecológica en comparación con los vehículos a combustible. De esta manera, al optar por una e-bike contribuyes a la reducción de la huella de carbono y al cuidado del medio ambiente.

Aunque la inversión inicial en una bicicleta eléctrica puede ser grande, los costos operativos son mucho menores en comparación con los vehículos motorizados. No vas a necesitar pagar por nafta. Asimismo, los costos de mantenimiento generalmente suelen ser más bajos.

Las e-bikes son aliadas para contextos difíciles. La asistencia eléctrica hace que el pedaleo sea menos agotador, especialmente en terrenos inclinados o durante trayectos largos. Esto permite que más cantidad de personas, independientemente de su condición física, pueda disfrutar de los beneficios de un deporte hermoso como el

ciclismo

.

Las bicicletas eléctricas están diseñadas para adaptarse a distintos terrenos y condiciones climáticas. Ya sea que estés en la ciudad, en el campo, en un sendero de montaña o en una carretera, hay una e-bike que te será útil.

Diseñadas para terrenos difíciles, estas bicis cuentan con motores potentes, suspensiones robustas y neumáticos anchos, especiales para manejar en caminos irregulares y pendientes pronunciadas. Una bicicleta deportiva que puede servir para estos terrenos es el modelo Eride 930 de la marca Scott.

Las bicicletas para usar en la ciudad son ligeras, cómodas y prácticas. Los modelos urbanos suelen tener guardabarros, luces y portaequipajes. Uno muy lindo es el 852327 de Enerby.

Perfectas para los que necesitan una solución de transporte compacta, estas bicicletas pueden plegarse y guardarse fácilmente en casi cualquier lado. Son ideales para quienes combinan el ciclismo con el subte, el tren o colectivo. De este tipo es el modelo Worker de Rango.

Diseñadas para la velocidad y la eficiencia en rutas pavimentadas, estas bicicletas son ligeras y aerodinámicas, con neumáticos estrechos y motores que proporcionan una asistencia suave. La marca Rango también comercializa bicis de este estilo.

El material, el motor, la batería y otros componentes de las bicicletas eléctricas pueden variar según el modelo. Acá, te dejamos una guía para que puedas elegir estas características de acuerdo a tus necesidades.

Existen principalmente dos tipos de motores en las bicicletas eléctricas: los motores de buje (hub) y los motores centrales (mid-drive). Los motores de buje están ubicados en el centro de la rueda y son ideales para terrenos llanos, mientras que los motores centrales están colocados en el centro del cuadro y ofrecen un mejor equilibrio y rendimiento en terrenos inclinados.

La potencia del motor de las e-bikes se mide en vatios (W). Las bicicletas eléctricas suelen tener motores que van desde 250W hasta 750W o más. Un motor más potente tiene la ventaja de proporcionar mayor asistencia y velocidad, aunque también puede consumir más batería.

La capacidad de la batería de una bicicleta eléctrica se mide en vatios-hora (Wh) y determina la autonomía de la bicicleta, es decir, la distancia que puede recorrer sin tener que ser recargada. Las baterías que tienen una mayor capacidad son especiales para recorridos más largos, en donde no hay posibilidad de enchufar la e-bike.

El tiempo que tarda una batería en cargarse completamente una batería de bicicleta eléctrica varía según su capacidad y el tipo de cargador. Generalmente, la carga puede tomar entre 3 y 6 horas.

Las baterías de litio son más ligeras, tienen una mayor capacidad y una vida útil más larga en comparación con las baterías de plomo-ácido. También son más costosos. Sin embargo, su rendimiento superior las convierte en la opción preferida.

Las bicicletas eléctricas suelen ofrecer diferentes modos de asistencia al pedaleo, que permiten al ciclista ajustar el nivel de ayuda proporcionada por el motor de acuerdo a sus necesidades físicas. Esto puede ser útil para gestionar el esfuerzo y la autonomía de la batería.

Los sensores de pedaleo van directo a la particularidad de cada ciclista. Estos sensores detectan el esfuerzo de quien está pedaleando y ajustan la asistencia del motor en consecuencia. Existen sensores de cadencia y sensores de torque, siendo estos últimos más precisos y sensibles.

Las bicicletas eléctricas suelen estar hechas de aluminio y de acero. Los cuadros de aluminio son ligeros y resistentes a la corrosión, mientras que los de acero son más pesados pero ofrecen una mayor durabilidad.

En tanto, a la hora de elegir una e-bike, es importante tener en cuenta que el diseño sea ergonómico para garantizar la comodidad del ciclista. Esto incluye una posición de manejo adecuada, un asiento cómodo y manillares ajustables.

Otros componentes que tenés que tener en cuenta a la hora de elegir una bicicleta eléctrica son los siguientes.

Los frenos son un componente esencial para la seguridad. Las bicicletas eléctricas suelen estar equipadas con frenos de disco. Este tipo ofrece un mejor rendimiento de frenado en diversas condiciones climáticas.

La suspensión ayuda a absorber los impactos y proporciona una conducción más suave. Las bicicletas de montaña eléctricas suelen tener suspensión delantera o doble suspensión para manejar en los terrenos más difíciles.

Los neumáticos deben ser adecuados para el tipo de terreno en el que vas a usar la bicicleta. Los neumáticos más anchos dan una mayor estabilidad y tracción, mientras que los más estrechos son ideales para usar en pavimento.

Elegir una bicicleta no es fácil y si además es eléctrica las variantes a analizar son aún más. Antes de que decidas, te aconsejamos:

Las bicicletas eléctricas ofrecen una combinación única de beneficios para tu salud física y el medioambiente de todos. Los distintos materiales, motores y baterías con los que están hechas ofrecen una amplia gama para diversos usuarios: desde deportistas hasta ciclistas ocasionales.

Por otro lado, también aportan un beneficio especial para tu economía: si bien invertir en una bicicleta eléctrica puede parecer costoso al principio, es un vehículo que te permitirá ahorrar plata en combustible y mantenimiento.

Por último, te queremos recordar que a la hora de andar en bicicleta es necesario que utilices luces de seguridad y un buen casco. De las primeras, podrás conseguir un kit de la marca Dakota. En tanto, SLP tiene productos de protección para tu cabeza. Ahora que ya tenés la

bici

y todos los elementos, es momento de que des la vuelta al mundo pedaleando.