Guía para reparar problemas comunes en monitores LG 144 Hz

Los

monitores

LG con 144 Hz destacan por su alta frecuencia de actualización, lo que los hace ideales para juegos de ritmo rápido y tareas que requieren una rápida respuesta visual. 

Los monitores LG con 144 Hz son ideales para disfrutar de una experiencia visual de primera, ya sea jugando, trabajando o viendo series. Pero, como cualquier dispositivo electrónico, pueden tener sus días malos y darte algún que otro dolor de cabeza.

Si algo de eso te pasa, ¡no te preocupes! Acá te contamos cómo reconocer y arreglar esos problemas comunes que te podés cruzar con un

monitor

LG de 144 Hz. Así, vas a poder sacarle el jugo y mantenerlo en su mejor estado por mucho más tiempo.

Algunos de los problemas más frecuentes a los que te podés enfrentar con los monitores LG 144 Hz incluyen:

Sabemos que el parpadeo de la pantalla puede ser molesto y perjudicial para la vista. Por eso, acá te mostramos cómo podés solucionarlo:

Asegurate de que la frecuencia de actualización esté configurada correctamente. Para hacerlo, hacé lo siguiente:

Los controladores obsoletos pueden causar problemas de parpadeo. Visitá el sitio web del fabricante de tu tarjeta gráfica para descargar las actualizaciones más recientes.

Asegurate de que los cables HDMI o DisplayPort estén bien conectados. Tené en cuenta que podés necesitar cambiarlos en caso de que estén dañados.

Si tu monitor no detecta señal, te recomendamos que pruebes con lo siguiente:

Verificá que los cables estén bien conectados y en buen estado. Si sigue sin funcionar, podés probar con otros cables si es necesario.

Asegurate de que el monitor esté configurado para la entrada correcta (HDMI o DisplayPort) a través del menú OSD (On-Screen Display).

Si seguís teniendo inconvenientes, te recomendamos restablecer el monitor a su configuración de fábrica. 

Antes de hacerlo, revisá el manual del usuario para tener instrucciones específicas acerca de lo que tenés que hacer.

Como ya sabes, los colores distorsionados pueden arruinar tu experiencia visual. En caso de que se te presente esta situación, te dejamos algunos consejos útiles para que los corrijas.

Accedé al menú OSD y ajustá las configuraciones de color hasta que los colores se vean correctos.

Usá un software de calibración para ajustar los colores del monitor a niveles óptimos.

Para poder disfrutar de una buena experiencia visual, es importante que te asegures de que la tarjeta gráfica esté funcionando correctamente y que los controladores estén actualizados.

Los píxeles muertos o atascados son manchas molestas en la pantalla que pueden arruinar tu experiencia visual. 

Si bien no siempre vas a poder arreglarlos, podés intentar lo siguiente:

Aplicá suavemente presión sobre el área afectada con un paño suave mientras el monitor está apagado. Luego, enciéndelo para ver si el píxel responde.

Existen programas como JScreenFix que pueden ayudar a reactivar píxeles atascados.

Si el monitor no alcanza o no mantiene los 144 Hz, es probable que haya un problema de configuración o compatibilidad. 

Ante esta situación, podés hacer lo siguiente:

Asegurate de que estás usando un cable compatible con 144 Hz, como DisplayPort o HDMI 2.0.

En tu sistema operativo, ajustá la resolución y seleccioná 144 Hz en las opciones avanzadas de pantalla.

Algunas tarjetas gráficas pueden no soportar 144 Hz en ciertas resoluciones. Por eso, es importante que revises las especificaciones de tu tarjeta para asegurarte de que es la indicada.

Tené en cuenta que algunos modos de energía pueden limitar la frecuencia de actualización del monitor.

Si tu monitor LG incluye altavoces integrados y no emite sonido, te recomendamos que hagas esto:

En tu sistema operativo, seleccioná el monitor como dispositivo de salida predeterminado.

Chequéa que el

cable HDMI

o DisplayPort esté bien conectado, ya que también transmite el audio.

Revisá que el volumen del monitor no esté silenciado o demasiado bajo. A veces una distracción puede causar una mala pasada.

Conectá el monitor a otro dispositivo para descartar problemas de configuración.

Para evitar problemas futuros en tu monitor, te dejamos una serie de recomendaciones que pueden ayudarte: 

Para sacar el máximo provecho de tu monitor LG 144 Hz, no solo es importante que lo mantengas en buen estado, sino también que lo complementes con accesorios que potencien su rendimiento y comodidad. 

Si pasás largas horas frente a la pantalla, un soporte o brazo articulado puede marcar la diferencia. 

Estos accesorios te permiten ajustar la altura, inclinación y orientación del monitor para encontrar la posición más cómoda y ergonómica. Además, ayudan a mantener tu escritorio ordenado al liberar espacio.

Aunque pueda parecer un detalle menor, un cable HDMI o DisplayPort de calidad es fundamental para garantizar una conexión estable y aprovechar al máximo los 144 Hz de tu monitor. 

Buscá cables que sean compatibles con las especificaciones de tu modelo y, si es posible, optá por versiones con certificaciones oficiales para evitar problemas de transmisión.

Si pasás muchas horas frente al monitor, un filtro de luz azul puede reducir la fatiga visual y proteger tus ojos. 

También podés considerar un protector de pantalla para prevenir rayones o daños accidentales en el panel.

Para los gamers o quienes disfrutan de un espacio de trabajo personalizado, una base con iluminación LED o accesorios RGB pueden aportar un toque estético único.

Además, algunas bases ofrecen puertos USB adicionales, lo que puede ser muy útil para conectar otros dispositivos.

Los monitores LG 144 Hz son herramientas poderosas que te permiten disfrutar de una experiencia visual fluida y de alta calidad. 

Aunque pueden surgir problemas, la mayoría de ellos se pueden solucionar con un poco de paciencia y los pasos adecuados. 

Al seguir estas recomendaciones, vas a estar preparado para identificar y reparar las fallas más comunes, asegurándote de mantener tu monitor en óptimas condiciones por mucho tiempo. 

Recurrí al servicio técnico autorizado de LG o consultá la garantía del producto.

No, asegurate de usar cables que soporten la frecuencia de 144 Hz, como HDMI 2.0 o DisplayPort 1.2 o superior.

Algunos píxeles muertos son comunes y pueden considerarse dentro de las tolerancias de fabricación. Consultá la política de garantía de LG para este caso.

Descargá la versión más reciente desde el sitio web oficial de LG y seguí las instrucciones proporcionadas.

Si no tenés experiencia técnica, es mejor evitar abrir el monitor. Podrías dañarlo o invalidar la garantía. Buscá ayuda profesional.