Cómo descubrir y repará los problemas de tu monitor portátil

Solucioná los inconvenientes que puedan aparecer en uso cotidiano de tu pantalla portátil y ahorra tiempo y dinero.

En los últimos tiempos, los dispositivos externos como los

monitores

portátiles han ganado popularidad en el campo personal y en el laboral, gracias a su versatilidad y facilidad de transporte, ofreciendo a los usuarios una solución otrora impensada que actualmente no sólo es accesible, sino que se ha vuelto necesaria.

Estos dispositivos permiten expandir el espacio de trabajo en cualquier lugar, ya sea en una cafetería, en casa o durante un viaje de negocios, pero también nos ofrecen la posibilidad de llevar a estos lugares nuestras actividades de ocio.

Sin embargo, como puede suceder con cualquier dispositivo tecnológico, los monitores portátiles pueden presentar problemas que afecten su correcto funcionamiento y conocer cómo solucionar los problemas comunes es esencial para mantener la eficiencia y evitar frustraciones.

Uno de los problemas más frecuentes que experimentan los usuarios de monitores portátiles es la conexión.

Estos problemas pueden surgir por diversas razones, desde cables defectuosos hasta configuraciones incorrectas en el dispositivo fuente y solucionarlos es necesario para obtener una experiencia satisfactoria y lograr el objetivo para el que fue concebido este dispositivo.

Cables dañados o sueltos

Esto puede suceder cuando por el uso frecuente un cable USB-C o HDMI puede encontrarse dañado debido al desgaste o el maltrato, puede ser el culpable de la interrupción de la señal de video.

La solución es sencilla, reemplazá el cable defectuoso y disfruta de la ventaja que te ofrece tu

monitor

portátil.

Compatibilidad de puertos

Chequear previamente la compatibilidad de los puertos entre el emisor y tu monitor portátil parece una obviedad pero es necesario, ya que no todos los dispositivos tienen puertos compatibles.

Si esto sucede no es necesario entrar en pánico, hay 

Configuración incorrecta

Verifica que el dispositivo fuente esté configurado para enviar señal al monitor portátil.

Si no es así, seleccionalo dentro de las opciones de configuración o, en el caso en el que no esté, quizás debas actualizarlo

Verificación de cables y puertos

Como ya mencionamos antes, es necesario inspeccionar visualmente el buen estado de los cables USB-C o HDMI, para detectar daños que resalten a simple vista.

También es primordial chequear las conexiones físicas, asegurándote de que los cables estén completamente insertados en los puertos, tanto del monitor como del dispositivo fuente.

Finalmente, si el problema persiste, prueba con un cable de reemplazo para descartar que el problema sea el cable.

Configuración de ajustes de pantalla en el dispositivo fuente

Para evitar los inconvenientes que puede ocasionar la mala configuración de tu dispositivo, buscá en Windows la pestaña que indica "Configuración de pantalla" y verifica que el monitor portátil esté detectado y configurado como pantalla extendida o duplicada.

En macOS tenés que realizar una acción similar, yendo a "Preferencias del sistema", una vez allí seleccioná "Pantallas" y ajustá las configuraciones de pantalla.

Asegurate de que el dispositivo fuente esté configurado para enviar señal al monitor portátil.

Los problemas de pantalla pueden ser preocupantes, especialmente si el monitor muestra una pantalla negra o parpadeante.

Para solucionar estos baches en el camino, te mostraremos cuáles son los pasos que tenés que seguir.

Comprobación de la fuente de alimentación

Aunque parezca algo obvio, verificá que el monitor portátil esté enchufado y recibiendo la alimentación adecuada.

Si utiliza USB-C, chequeá que el cable esté conectado a un puerto que suministre energía.

Por otro lado, si tu monitor tiene como fuente de alimentación de energía una batería interna, tenés que asegurarte de que la misma tenga carga suficiente para garantizar su correcto funcionamiento.

Reinicio del monitor y dispositivo conectado

Primero, desconectá el monitor del dispositivo fuente y apagalo.

Luego reiniciá el dispositivo fuente y volvé a conectar el monitor.

Ajuste de la Frecuencia de Actualización

En el sistema operativo, ajustá la frecuencia de actualización a un valor compatible con el monitor portátil.

La tasa de actualización o de refresco, es la cantidad de veces que se repite la imagen por segundo en la pantalla y los valores dependen del uso del monitor, que en el caso de los portátiles, generalmente es de 60 Hz.

Verificación de Interferencias Electromagnéticas

Las ondas electromagnéticas de otros dispositivos pueden causar efectos dentro del monitor portátil

Asegurate de que el monitor esté alejado de otros dispositivos electrónicos que puedan causar interferencias, como routers Wi-Fi o teléfonos móviles.

A veces,

puede no coincidir con la del dispositivo fuente, lo que resulta en una imagen borrosa o distorsionada.

Chequeá y corregí la resolución para obtener claridad y nitidez en la imagen.

Ajuste de la resolución en el sistema operativo

Si tu

computadora

corre bajo el sistema operativo Windows, accedé a "Configuración de pantalla" y seleccioná la resolución nativa del monitor portátil.

En cambio si tenés una macOS, andá a "Preferencias del sistema" y buscá la pestaña "Pantallas", ahí vas a poder elegir la resolución adecuada.

Actualización de Controladores de Gráficos

En ocasiones los problemas pueden venir por la falta de actualización de los controladores.

Si ese es el caso, asegurate de que los controladores de gráficos del dispositivo fuente estén actualizados a la última versión. Si no están actualizados, realizá una actualización para resolver el inconveniente.

Con la última versión instalada, vas a poder resolver los problemas de compatibilidad y rendimiento que tu monitor presentó.

Si en tu monitor portátil aparecen colores desvanecidos o simplemente colores incorrectos que afectan la calidad de la imagen, esto puede deberse a una mala calibración del dispositivo o a una configuración errónea en la computadora.

Para realizar una correcta calibración de color en el monitor utilizá herramientas de calibración de color en el sistema operativo para ajustar el brillo, el contraste y los niveles de color.

Para verificación la configuracion de color en el dispositivo fuente, asegurate de que las configuraciones de color en la computadora estén optimizadas para el monitor portátil.

Además de tratar de obtener la mejor imágen, algunos monitores portátiles vienen con altavoces integrados, por lo que la ausencia de sonido puede ser frustrante.

Para verificar las conexiones de audio, asegurate de que el cable de audio esté correctamente conectado si el monitor requiere una conexión de audio separada.

Si tenes que configurar la salida de audio en el dispositivo fuente, chequeá en el sistema operativo y seleccioná el monitor portátil como dispositivo tu salida de audio elegida.

Como con todos los equipos electrónicos, para prolongar la vida útil de un monitor portátil, es importante realizar un mantenimiento regular.

Limpieza Regular

Usa un paño suave y seco para limpiar la pantalla y el cuerpo del monitor.

Evita el uso de limpiadores líquidos, este tipo de producto pueden dañar la pantalla.

Protección Durante el Transporte

Al trasladar la pantalla de un lugar a otro, es importante que uses una funda protectora para evitar daños que se pueden ocasionar durante el transporte.

Almacenamiento Adecuado

Guarda el monitor en un lugar seco y seguro cuando no esté en uso.

Evitá el sobrecalentamiento

Es importante no bloquear las ventilaciones y evitar el uso prolongado en ambientes calurosos.

Actualiza el software regularmente

Mantené el firmware del monitor y los controladores del dispositivo fuente actualizados.

La capacidad de autodiagnosticar y solucionar problemas comunes en monitores portátiles no solo ahorra tiempo y dinero, sino que también garantiza una experiencia de usuario fluida y satisfactoria.

Con los conocimientos adecuados y un enfoque proactivo en el mantenimiento, los monitores portátiles pueden ofrecer un rendimiento óptimo durante muchos años.

Mantenerse informado y preparado es clave para aprovechar al máximo estos dispositivos portátiles.