Comprar casas y departamentos: cómo impacta la salida del cepo en el precio de las propiedades

El viernes 11 de abril de 2025 marcó un antes y un después para el mercado inmobiliario argentino: el Gobierno anunció la salida del cepo cambiario tras más de seis años de restricciones en la compra y venta de dólares. Esta medida no solo modificó las reglas del juego para el mercado financiero en general, sino que también tuvo un impacto directo y notable en el mercado de casas y

, especialmente en el valor de las propiedades y la dinámica de compra con crédito hipotecario.

En este artículo, analizamos en detalle qué significa esta apertura para quienes buscan

, cómo afecta los precios de las propiedades y qué perspectivas se abren para el mercado inmobiliario en los próximos meses.

Durante seis años, el cepo cambiario limitó el acceso a la compra de dólares para personas físicas y empresas, generando un mercado paralelo con cotizaciones muy distintas del dólar oficial. Esto generó incertidumbre y complejidad para el mercado inmobiliario, que tradicionalmente se valoriza y comercializa en dólares, aunque las transacciones se concreten en pesos.

Con la eliminación del cepo, se estableció un esquema de bandas en el dólar oficial que oscila entre $1000 y $1400. Esto significa que el dólar oficial tiene ahora una mayor flexibilidad para ajustarse según las condiciones del mercado, y que las operaciones cambiarias se realizan con menos restricciones. Para quienes buscan comprar propiedades, este cambio se traduce en un entorno más previsible y competitivo.

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Una tendencia clave que ya venía marcando el mercado en 2024 y principios de 2025 fue el retorno del crédito hipotecario UVA (Unidad de Valor Adquisitivo), que permitió a muchas personas acceder a préstamos para la

, o de casas también. En abril de 2025, por ejemplo, se firmaron casi 3.636 escrituras en la Ciudad de Buenos Aires, un crecimiento del 32,2% interanual, y el 114 de esas operaciones fueron con hipoteca, frente a cifras casi nulas en años previos.

“De generarse nuevos créditos, creemos que podríamos llegar a duplicar la actividad inmobiliaria: lo confirma el último período en que hubo préstamos en 2018 porque para ese primer cuatrimestre ya teníamos más de 20 mil operaciones. Hoy, pese a que viene levantando, no registramos más de 11 mil escrituras. Por eso insistimos en trabajar con todos los actores inmobiliarios en conjunto”, afirmó Jorge De Bártolo, presidente de Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires.

Este incremento en la demanda fue posible porque el crédito hipotecario UVA ajusta la deuda por inflación, lo que lo hace más accesible y sustentable para muchas familias, aunque a la vez implica cierta exposición a la evolución económica y cambiaria.

La principal forma en que la salida del cepo impacta el precio de las propiedades tiene que ver con el tipo de cambio que se utiliza para calcular el valor en pesos y, en particular, para determinar el monto y las cuotas de los créditos hipotecarios.

Antes del 11 de abril, para las operaciones con crédito, el dólar de referencia era el dólar MEP, que cerró ese día en $1362,74. Hoy, con el dólar oficial rondando los $1140, la cantidad de pesos que se necesitan para comprar una propiedad en dólares cayó significativamente.

En términos simples: el precio en dólares de las propiedades se mantiene estable, pero ahora se requieren menos pesos para comprar los mismos dólares con los que se fija el precio. Esto facilita el acceso a la vivienda para quienes necesitan crédito hipotecario, ya que las cuotas mensuales bajan y los requisitos de ingreso se vuelven menos estrictos.

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Es importante destacar que esta baja en pesos no implica que las propiedades estén perdiendo valor en dólares. Para compradores que pueden pagar en efectivo y en dólares, la situación es distinta: el valor en dólares sigue siendo el principal referente, y allí los precios se mantienen o se ajustan según la demanda.

Además, si analizamos la cotización del dólar oficial en los primeros días tras la salida del cepo, se observó una devaluación inicial cercana al 14%, pasando de $1097,5 a $1250. Esto impactó momentáneamente en el precio en pesos de las propiedades, que subió, aunque luego se estabilizó.

Por lo tanto, dependiendo del momento de compra y del tipo de cambio utilizado para la operación, el efecto en los precios en pesos puede variar, generando oportunidades para algunos compradores y cierta volatilidad para otros.

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La eliminación del cepo abre la puerta a un mercado más dinámico y transparente. Se espera que la combinación de crédito hipotecario accesible y menor incertidumbre genere un aumento sostenido en la demanda, impulsando la actividad inmobiliaria y favoreciendo la oferta.

Para el inversor, este escenario también puede representar una oportunidad, ya que la mayor previsibilidad y la estabilidad del tipo de cambio oficial reducen los riesgos cambiarios, lo que hace más atractivo invertir en propiedades.

En definitiva, la salida del cepo supone un punto de inflexión que puede consolidar la recuperación del mercado inmobiliario, permitiendo que más argentinos puedan cumplir el sueño de la casa propia o mejorar su inversión inmobiliaria con condiciones más claras y justas.

Autor: Inés Soler