PH o departamento: qué conviene más alquilar en Argentina

En el mercado inmobiliario argentino, elegir entre alquilar un PH (propiedad horizontal) o un departamento puede ser una decisión compleja. Esta elección está influida no solo por las características propias de cada tipo de propiedad, sino también por factores como la ubicación, el presupuesto disponible y las expectativas del inquilino. En un contexto donde el mercado inmobiliario está en constante cambio, es fundamental contar con información detallada que permita evaluar las opciones disponibles de manera objetiva.

Tanto los PH como los departamentos tienen ventajas y desventajas que se adaptan a diferentes estilos de vida. Mientras que un PH puede brindar mayor privacidad y espacios amplios, un departamento ofrece amenities modernos y un entorno más seguro. Sin embargo, la decisión final dependerá de variables específicas, como el tamaño de la familia, la frecuencia con la que se utilizan áreas comunes y la tolerancia al ruido o a la convivencia cercana con vecinos.

En este artículo, vamos a desglosar las principales características de los PH y los departamentos, considerando aspectos económicos, funcionales y estéticos. El propósito es brindarte una guía clara que te ayude a elegir la opción más adecuada para vos, teniendo en cuenta tus necesidades personales y las dinámicas actuales del mercado de alquiler en Argentina.

Alquilar un PH (propiedad horizontal) puede ser una excelente opción dependiendo de tus necesidades y estilo de vida. Este tipo de propiedad, característico por combinar elementos de casas y departamentos, tiene ventajas únicas que pueden resultar atractivas, aunque también presenta ciertas limitaciones que conviene evaluar antes de tomar una decisión.

A continuación, mencionamos algunas de las ventajas principales al respecto de alquilar un PH: 

Los PH suelen ofrecer ambientes más amplios que los departamentos promedio, lo que los hace ideales para familias o quienes buscan mayor comodidad. Muchas unidades cuentan con patios, terrazas o jardines propios, lo que brinda un espacio adicional para disfrutar al aire libre.

Al tratarse de propiedades con menor cantidad de vecinos, los PH permiten disfrutar de un entorno más tranquilo. La distribución de los espacios reduce las posibilidades de ruidos molestos provenientes de otras unidades.

En comparación con los departamentos, las expensas suelen ser mínimas o inexistentes, lo que alivia la carga mensual para el inquilino. Esto es particularmente atractivo para quienes priorizan la autonomía económica.

Muchos PH, especialmente los antiguos, poseen características arquitectónicas que los hacen únicos, como techos altos, pisos de madera o detalles ornamentales. Este estilo puede ser un plus para quienes valoran propiedades con carácter y personalidad.

Por su parte, en lo que respecta a las desventajas, se pueden considerar los siguientes puntos clave: 

La cantidad de PH disponibles para alquilar es significativamente menor en comparación con departamentos, lo que puede dificultar encontrar una unidad que cumpla con tus requisitos. Esto puede implicar un proceso de búsqueda más largo y complicado.

Muchas de estas propiedades tienen una antigüedad considerable, lo que puede derivar en problemas estructurales como filtraciones, cañerías viejas o sistemas eléctricos obsoletos. El mantenimiento suele recaer en el inquilino, lo que puede representar un gasto adicional no planificado.

En los casos donde el PH no está subdividido completamente, es necesario acordar decisiones con los demás propietarios. Esto puede generar inconvenientes al momento de realizar reparaciones o cambios en la propiedad.

A diferencia de los departamentos, los PH no suelen contar con servicios adicionales como gimnasios, piscinas o salones de usos múltiples. Para algunos, esta ausencia puede ser un inconveniente frente a las comodidades que ofrecen los edificios modernos.

Al evaluar las ventajas y desventajas de alquilar un PH, es importante considerar tus necesidades específicas y las condiciones del mercado. Si buscás espacio, privacidad y costos bajos de mantenimiento, un PH puede ser una opción ideal. Sin embargo, si priorizas amenities modernos o un proceso más sencillo de búsqueda, puede que otras alternativas sean más adecuadas.

Los departamentos son una de las opciones de alquiler más populares en Argentina, especialmente en las grandes ciudades como Buenos Aires. Al ofrecer una variedad de comodidades y una mayor disponibilidad en el mercado, representan una alternativa flexible para diferentes estilos de vida. Sin embargo, alquilar un departamento también implica considerar ciertas desventajas que podrían influir en la experiencia de vida.

Acá mencionamos algunas de las ventajas más importantes para considerar con respecto al alquiler de un departamento: 

La mayoría de los edificios cuentan con medidas de seguridad como cámaras de vigilancia, personal de portería y sistemas de acceso controlado, lo que brinda tranquilidad a los inquilinos. En zonas urbanas con mayor movimiento, esta seguridad adicional es especialmente valorada.

Muchos edificios ofrecen comodidades como piscinas, gimnasios, salones de usos múltiples (SUM), áreas verdes y espacios para eventos. Estas instalaciones pueden ser un valor agregado significativo, ya que permiten disfrutar de servicios de calidad sin salir del edificio.

Los departamentos suelen encontrarse en zonas céntricas o con acceso a transporte público, servicios y actividades comerciales. Esto facilita la vida diaria, especialmente para quienes buscan reducir los tiempos de traslado.

Las reparaciones importantes, como problemas en ascensores o mantenimiento estructural del edificio, suelen ser gestionadas y cubiertas por el consorcio de propietarios, lo que disminuye responsabilidades para el inquilino.

Como no todo puede ser perfecto, también mencionamos algunas desventajas que podría presentar el alquiler de un departamento, en comparación con un PH: 

Uno de los principales inconvenientes es el costo de las expensas, que puede ser significativo, especialmente en edificios con amenities de lujo. Este gasto mensual, que se suma al alquiler, puede afectar considerablemente el presupuesto.

La cercanía con vecinos y áreas comunes, como ascensores o pasillos, puede derivar en ruidos molestos o falta de privacidad. En edificios con alta densidad de ocupación, este problema puede intensificarse.

Algunos edificios tienen normativas que prohíben o limitan la tenencia de mascotas, lo que puede ser un factor decisivo para los amantes de los animales. Incluso en edificios donde se permiten mascotas, los espacios reducidos pueden no ser ideales para su bienestar.

Los departamentos suelen tener restricciones en cuanto a modificaciones, lo que limita la posibilidad de personalizar el espacio según las preferencias del inquilino. Esto puede ser frustrante para quienes buscan hacer del lugar un hogar más acorde a su estilo.

Alquilar un departamento es una alternativa práctica y conveniente para quienes priorizan la seguridad, las comodidades modernas y la proximidad a zonas urbanas clave. No obstante, es crucial considerar los costos adicionales y las restricciones que pueden surgir, especialmente en edificios con normas estrictas o altos costos de mantenimiento. Tu elección dependerá de tus necesidades, estilo de vida y presupuesto disponible.

Al momento de decidir entre alquilar un PH o un departamento en Argentina, los aspectos económicos son un factor determinante. Analizar los costos asociados, las variaciones en el mercado y la rentabilidad a largo plazo puede ayudarte a evaluar cuál de estas opciones es más adecuada para tu situación financiera.

Algunos de los costos más importantes que deberías considerar antes de alquilar, ya sea un PH o un departamento, son los siguientes:

Los PHs, al ofrecer espacios más amplios y sin expensas elevadas, pueden tener un costo base similar al de los departamentos en la misma zona. Sin embargo, la oferta limitada en ciertos barrios puede incrementar su valor, especialmente en zonas como Palermo o Colegiales.

En cambio, los departamentos presentan una mayor diversidad de precios gracias a su amplia disponibilidad, pero las expensas suelen agregar un costo mensual significativo, que en algunos casos supera el 30% del valor del alquiler.

Tanto en PHs como en departamentos, los inquilinos deben considerar gastos iniciales como depósito, comisión inmobiliaria y costos de mudanza. En departamentos con amenities, las expensas iniciales pueden incluir un monto extra por el uso de servicios comunes.

En los PHs, el mantenimiento puede generar costos adicionales, ya que suelen ser propiedades más antiguas que requieren reparaciones frecuentes, como cañerías o instalaciones eléctricas.

En los últimos años, el mercado de alquiler en Argentina ha experimentado fluctuaciones significativas debido a la inflación y la ley de alquileres. Según datos recientes, el precio promedio de un alquiler en la Ciudad de Buenos Aires subió más de un 120% en 2023, complicando la accesibilidad para los inquilinos.

En zonas suburbanas, los PHs pueden ser más económicos y representar una oportunidad atractiva para quienes buscan espacios amplios sin alejarse demasiado del centro urbano.

Elegir entre un PH o un departamento depende de varios factores clave: el estilo de vida, las prioridades económicas y las necesidades específicas de cada inquilino. Los PHs ofrecen mayor privacidad, espacios amplios y costos de mantenimiento más bajos, pero suelen tener una oferta limitada y posibles problemas de infraestructura. Por otro lado, los departamentos garantizan seguridad, amenities modernos y una ubicación estratégica, aunque con expensas más altas y restricciones en algunos casos.

Es esencial evaluar tus prioridades y analizar detalladamente los costos asociados a cada opción. Si valoras la independencia y el acceso a espacios al aire libre, un PH podría ser lo que estás buscando. En cambio, si preferís la comodidad y la seguridad de un edificio moderno, el departamento podría ser tu mejor elección. Considera tus recursos financieros, necesidades personales y las tendencias del mercado para tomar una decisión informada que se alinee con tu situación y expectativas.

No hay una respuesta única, ya que depende de las necesidades y preferencias de cada persona. Un PH puede ser mejor si buscas mayor privacidad, más espacio y la posibilidad de disfrutar de un patio o terraza, además de tener menores costos de mantenimiento. En cambio, un departamento puede ser ideal si priorizas la seguridad, la accesibilidad a amenities y la comodidad de vivir en un edificio con servicios comunes, aunque con mayores expensas. La decisión depende de tu estilo de vida, presupuesto y ubicación preferida.

Los PH no suelen pagar expensas elevadas porque no comparten áreas comunes con otros propietarios, lo que elimina los costos de mantenimiento de servicios como seguridad, limpieza o áreas comunes, que sí son habituales en los departamentos. Sin embargo, pueden existir gastos compartidos entre los propietarios de los PH que incluyen el mantenimiento de áreas comunes (como el acceso al edificio), aunque estos costos son significativamente menores que los de las expensas de un departamento. Cada PH tiene un área exclusiva, lo que reduce los costos asociados a propiedades colectivas.

La principal diferencia entre un PH y una casa radica en la propiedad y el tipo de organización. Un PH (propiedad horizontal) es un tipo de propiedad donde cada unidad pertenece a un propietario, pero el terreno y las áreas comunes, como pasillos o patios, se comparten con otros inquilinos. En cambio, una casa es una propiedad independiente que no comparte terreno ni áreas comunes con otras unidades. Las casas suelen ofrecer mayor privacidad y espacio, mientras que los PHs pueden ser más accesibles económicamente y ubicarse en áreas urbanas.

La rentabilidad de alquilar un PH o un departamento depende de varios factores, como la ubicación, la demanda y el perfil del inquilino. Los departamentos pueden ser más rentables en zonas céntricas, debido a su mayor demanda y las comodidades que ofrecen. Sin embargo, los PHs pueden ser una opción más rentable en barrios tranquilos o suburbanos, ya que suelen tener alquileres más bajos y menores costos asociados a las expensas. Además, la rentabilidad también depende de la duración del contrato de alquiler, el mantenimiento de la propiedad y el tipo de servicios adicionales que se ofrecen.